Durante el tiempo que hemos trabajado Raúl y yo en encuentro247, hemos visto cómo Dios nos ha permitido llegar a muchos lugares con su Palabra por medio de este website.
Para mí en lo personal ha sido un privilegio el haber tenido la oportunidad de trabajar durante este tiempo en este proyecto de encuentro247, especialmente porque ha sido una plataforma para que cada prédica y estudio bíblico de la iglesia de Cristo, Llamada Final Atlanta esté llegando al mundo entero.
Quiero agradecer especialmente a los pastores Eric y Cristina Millarc por todo el apoyo que nos han brindado a Raúl y a mí para que encuentro247 haya tenido un lugar en donde comenzar a desarrollarse, sin su apoyo la cosa habría sido muy difícil. Mil gracias desde el fondo de nuestros corazones.
Este proyecto que nació en el corazón de Raúl Sánchez y que comenzó hace un año en Abril del 2010, ha sido toda una experiencia para mí en lo personal. Desde la planeación inicial del proyecto, hasta ver como Dios nos ha permitido crecer.
Quiero agradecer personalmente a Raúl por haber depositado toda su confianza en mí, y por haberme brindado la gran oportunidad de servir a Dios de esta manera tan noble y de alcance mundial; y por haber tenido el privilegio de poner mi granito de arena y formar parte de este retador proyecto.
Siempre que comenzamos algo en la vida, tenemos planes, metas y sueños que queremos alcanzar, pero en el caminar muchas veces Dios va moldeándonos y va puliéndonos, y en el proceso El va poniendo sus deseos en nuestro corazón de las cosas que quiere que hagamos para El.
En este momento crucial en mi vida personal, he sentido la gran necesidad de emprender un nuevo reto, un nuevo camino, sabiendo que encuentro247 está en muy buenas manos, y va a seguir creciendo con la ayuda de Dios, y con el espíritu emprendedor de su creador y director general, el señor Raúl Sánchez.
Por mi parte, ha culminado mi tarea en encuentro247 pero solo para emprender un nuevo horizonte, en donde he sentido fuertemente el enfocarme especialmente, en llevar un mensaje de esperanza a aquellos que no conocen a Jesucristo como su Señor y Salvador. Por medio del Internet quiero llevar un mensaje sencillo, y compartir las buenas nuevas de salvación a aquellos que por una razón u otra no han oído el mensaje de Dios y tal vez nunca han ido a una iglesia.
Quiero aclarar que voy a continuar congregándome en la iglesia de Llamada Final Atlanta, en donde mi familia y yo nos hemos congregado por mas de 10 años; la cual ha sido mucho mas que una iglesia, ha sido nuestra familia, y nuestros pastores que con su vara y su cayado nos han guiado y defendido de los lobos, a los cuales amamos, respetamos y seguiremos en su redil hasta que el Señor nos quiera seguir usando ahí.
Desde hace varios años atrás, reservé el nombre www.SalveseQuienPueda.com con la idea de compartir el mensaje de salvación a los no alcanzados con la ayuda del Espíritu Santo, pero tuve que esperar hasta que Dios me mostrara el momento correcto para comenzar con este proyecto.
Los tiempos finales están a la puerta, y creo que es hora de que todos por igual nos demos a la tarea de anunciar que el reino de los cielos se ha acercado, y que solo en Jesucristo hay salvación, haciendo a un lado las excusas, los temores, la vergüenza y el qué dirán. Si es necesario, busca el salir en grupos, o al menos en parejas con tus hermanos en Cristo para proclamar que el día del Señor está cerca.
Congregarnos en la iglesia es vital, y Dios mismo nos pide que lo hagamos, pero no para hacer acto de presencia, ni para ir simplemente a escuchar una prédica mas, sino para decirle a Dios y a tu pastor, Señor heme aquí, úsame, haz conmigo conforme a tu voluntad, muéstrame qué quieres que haga por ti el día de hoy.
La iglesia es simplemente como un campo de entrenamiento, para que seamos preparados para formar parte en las filas del ejército del Señor y hacer su obra; y no para que simplemente seas una oveja que no hace nada más que comer Palabra, y engordar por no dar de gracia lo que has recibido de gracia.
La bendición más grande está en dar, en lugar de recibir. En dar tu tiempo, tu esfuerzo, dar lo que Dios ponga en tu corazón, recordando que al final Dios te recompensará sobremanera.
Que Dios te bendiga grandemente y te guarde. Tu hermano en Cristo,
Eduardo Silva
www.SalveseQuienPueda.com