Cuantos “José’s” hay en la vuelta, olvidados por propios y extranos, pero un día resurgen, de las cenizas, siendo nuevas personas, transformados, regresan como Reyes.
Es la historia de José, vendido por sus propios hermanos como exclavo. De exclavo a Rey…
Eso es lo que Dios hace, lo despreciado lo vuelve muy preciado.