Cantares 5:10-16 Mi amado es resplandeciente y sonrojado, distinguido entre diez mil.11 Su cabeza es como oro, oro puro, sus cabellos, como racimos de dátiles, negros como el cuervo.12 Sus ojos son como paloma, junto a corrientes de agua, bañados en leche, colocados en su engaste.13 Sus mejillas, como eras de bálsamo, como riberas de hierbas aromáticas; sus labios son lirios que destilan mirra líquida.14 Sus manos, barras de oro en gastadas de berilo; su vientre, marfil tallado recubierto de zafiros. 15 Sus piernas, columnas de alabastro asentadas sobre basas de oro puro; su aspecto, como el Líbano, gallardo como los cedros.16 Su paladar, dulcísimo, y todo él, deseable. Este es mi amado y éste es mi amigo, hijas de Jerusalén.
verso 9 ¿Por qué es tu amado mejor que todos los demás, oh mujer de singular belleza?¿Qué hace que tu amado sea tan especial para que te hagamos esa promesa?
Isaías 43:10 Vosotros sois mis testigos–declara el SEÑOR– y mi siervo a quien he escogido, para que me conozcáis y creáis en mí, y entendáis que yo soy. Antes de mí no fue formado otro dios, ni después de mí lo habrá.
Mateo 6:22 La lámpara del cuerpo es el ojo; por eso, si tu ojo está sano, todo tu cuerpo estará lleno de luz.
1 Juan 3:17 Si alguien que posee bienes materiales ve que su hermano está pasando necesidad, y no tiene compasión de él, ¿cómo se puede decir que el amor de Dios habita en él?
